Esta semana fue más cortita, pero no por eso menos intensa.
El circo es una oportunidad para aprender a sacar todas nuestras capacidades de coordinación, paciencia, persistencia, superación, gestión de la frustración, etc.
Hemos practicado malabares y también hemos construido nuestras propias mazas de malabares, aros encesta, molinillos y unas preciosas cariocas recicladas para practicar nuestras destrezas. También son muy importante las y los equilibristas del circo, así que hemos realizado circuitos de equilibrio y construido unos zancos con latas para convertirnos en zancudos por momentos.
Entre actividad y actividad hemos sacado tiempo para celebrar un cumpleaños entre risas.
Como cada viernes tuvimos nuestra fiesta/gymkana del agua y lo pasamos de maravilla refrescándonos.
El circo tiene unos temerosos aros de fuego por donde trapecistas, equilibristas y demás artistas han cruzado realizando unos espectaculares números de circo.
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